Llevo ya varios años con Seguros de salud de adeslas, y sinceramente, ha sido una de las decisiones más acertadas que he tomado en cuanto a bienestar personal y tranquilidad familiar. Al principio, como muchas personas, me planteaba si realmente merecía la pena pagar un seguro privado teniendo acceso a la sanidad pública. Pero con el tiempo, y especialmente después de vivir algunas situaciones médicas inesperadas, entendí el verdadero valor de estar asegurado.
Lo primero que me convenció fue la rapidez. Poder pedir una cita con un especialista en pocos días, o incluso en el mismo día, es algo que no tiene precio cuando se trata de tu salud o la de tus hijos. En mi caso, he necesitado consultas con dermatólogos, fisioterapeutas y digestivos, y nunca tuve que esperar más de una semana. Eso reduce muchísimo la ansiedad que generan ciertos síntomas y te permite actuar rápido.
Otra gran ventaja es la amplia red de profesionales y centros médicos con los que trabaja Adeslas. Vivo en una ciudad mediana y aún así tengo múltiples opciones para elegir entre clínicas, hospitales y especialistas. Además, su app y plataforma online facilitan muchísimo la gestión de citas, autorizaciones o reembolsos, algo que valoro mucho porque no tengo tiempo para complicaciones.
También me ha resultado muy útil su cobertura de medicina preventiva. Gracias al seguro, me hago revisiones periódicas, análisis y pruebas que quizás, de otro modo, iría posponiendo. En más de una ocasión, esos chequeos me han permitido detectar y tratar a tiempo pequeños problemas de salud antes de que se complicaran.
Y por supuesto, está la tranquilidad emocional. Saber que, ante cualquier imprevisto, tengo acceso inmediato a atención médica de calidad me da mucha seguridad. Esto fue especialmente evidente durante la pandemia, cuando la sanidad pública estaba saturada. Mi seguro me permitió continuar con mis revisiones y consultas sin retrasos.
En resumen, tener un seguro de salud con Adeslas ha mejorado significativamente mi calidad de vida. No solo por el acceso rápido a atención médica, sino por la sensación de estar respaldado ante cualquier problema de salud. Para mí, más que un gasto, es una inversión en tranquilidad y en bienestar a largo plazo.