Un concepto básico en vehículos recreativos es la masa máxima autorizada, o MMA, que se define como el peso máximo que puede alcanzar un vehículo para circular legalmente por la vía pública. Esta información se especifica en los principales portales de compra o alquiler caravanas asturias, pues se trata de un parámetro que influye no solo en la seguridad y estabilidad del vehículo, sino también en el carné requerido, el impuesto de matriculación o el seguro obligatorio.
Los valores límite de la MMA (Masa Máxima Autorizada) están recogidos en el código de circulación. Se establece que las caravanas que superan los cuatro mil doscientos cincuenta kilogramos necesitan un permiso especial para circular por carretera: el B+E, específico para conducir conjuntos de vehículos. (En las autocaravanas de estas características, en cambio, el carné que se precisa en el tipo C). Asimismo, precisan una ITV individual y un seguro independiente.
Por su parte, las caravanas de más de tres mil quinientos kilogramos de peso (que no sobrepasen la MMA del punto anterior) son percibidas como autocaravanas. Para circular con ellas, el usuario está obligado a obtener un permiso o autorización especial para remolques más pesados de lo habitual, lo que supone un hándicap en todos los sentidos. Estas caravanas también deben abonar un impuesto de circulación extra y asegurarse con una póliza adicional.
Respecto a las caravanas de MMA igual o inferior a los tres mil quinientos kilogramos, el permiso B es suficiente para conducirlas por la vía pública. No obstante, siguen requiriendo una póliza propia y pasar la ITV cada seis años desde su primera matriculación y cada dos años después.
Las caravanas ligeras, de masa igual o inferior a los setecientos cincuenta kilogramos, son la opción más ventajosa: con ellas, puede circularse con el carné B, sin contratar un seguro adicional, ni pasar la inspección técnica de vehículos.